Marita Lorenz: espía y amante de Castro

Marita Lorenz

Marita Lorenz (1939-2019) es una escritora alemana residente en EEUU que fue espía del gobierno estadounidense involucrada en un intento para asesinar a Fidel Castro. También testificó contra la CIA en un juicio por el asesinato de John F. Kennedy. Durante la Segunda Guerra Mundial, sus padres fueron acusados de ser espías norteamericanos, su padre fue enviado a servir en el ejército y su madre y ella fueron enviadas al campo de concentración de Bergen-Belsen. Tras la caída del régimen nazi, ambas fueron liberadas y la familia se mudó a Nueva York donde trabajarían como agentes de la CIA.

En 1959 conoció a Fidel durante un viaje familiar a La Habana y fueron amantes por un tiempo. Según sus propias declaraciones, mientras estaba embarazada de Fidel fue drogada y secuestrada por un supuesto comando de la CIA, quienes la engañaron diciéndole que había abortado (aunque dice haber visto a este hijo suyo posteriormente). Más tardé abandonó a Fidel y volvió a Nueva York.

En 1960 fue reclutada por el agente de la CIA Frank Sturgis y entrenada por el jefe de la Brigada Anticomunista Internacional, Gerry Patrick Hemming, en la estación JMWAVE.

Según declaraciones de Marita, después de su entrenamiento, fue enviada a Cuba para envenenar a Castro. Este ya tenía ciertas sospechas y le preguntó si venía a matarlo, entregándole su propia arma para que llevara cabo su cometido, pero que en el momento crucial no pudo hacerlo. Al parecer, declaraciones del propio Castro confirman esta anécdota.

Todo esto lo narra ella misma en su libro auto-biográfico, 'Yo fui la espía que amó al Comandante'.

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