Fósiles vivientes: peces "anfibios".

La existencia de algunas especies de peces actuales que son capaces de respirar fuera del agua y que han adoptado ciertos comportamientos de supervivencia similares a los de otros animales terrestres sugiere la posibilidad de que los primeros anfibios provinieran de una o varias especies de peces más primitivos y quizá lejanamente emparentados con estos. Aún así me sigue pareciendo una gran incógnita a qué causas ambientales concretas responden este tipo de progresos evolutivos y cómo se desarrollan nuevos órganos, como los pulmones, de una manera que sea gradual y que resulten plenamente funcionales a la vez.

Algunos de los ejemplo más considerables de dichos peces "anfibios" son los siguientes:

- Los peces pulmonados (Dipnoi).

- Los peces del fango (Periophthalmus).

- La perca trepadora o gourami trepador (Anabas testudineus).

- El rivulín o almirante de manglar (Kryptolebias marmoratus).

- El pez gato caminante (Clarias batrachus).

- El pez cabeza de serpiente (Channa micropeltes).

EL EXTRAÑO CASO DEL 

PEZ DE CUATRO OJOS

- El pez de cuatro ojos (Anableps anableps), si bien no es un pez con la capacidad de respirar fuera del agua, es un ejemplo curioso de los distintos derroteros que puede tomar la evolución, pues esta especie ha desarrollado “cuatros ojos” que le permiten ver tanto lo que hay en el fondo del agua como lo que hay por encima suya mientras nada por la superficie, pudiendo localizar presas y evitar a los                                                                      predadores de ambos hábitats con gran                                                                      eficiencia.